lunes, 10 de noviembre de 2008

Ondas...

Escuchando Silent Warrior y sentado en un manto verde, húmedo, en Central Park, junto a un lago...
Contemplo Ondas provocadas por una piedra que yo mismo he lanzado.
Furioso
Se expanden
desde el centro hacia afuera...
Desaparecen... como el Tiempo.
Se expande... Se mueve...
Desaparece con la Muerte
Y regresa...
Ondas recurrentes
Controlan la vida
Nadie se percata.
Los durmientes sólo ven ondas
y ni siquiera se preguntan que hacen esas ondas
Yo lo sé
Pero ¿para qué molestarme en decirlo?
Contemplo...
No lanzo más piedras, pero alguien si.
Se acercame pregunta la hora...
que ironía
y yo pensando en las ondas en movimiento del Tiempo...
No me gusta el efecto que provocanen la genteparecen inofensivas
pero hipnotizanatrapante atraen como una espiral
y te expande desde el centro hacia afuera
No puedo explicar el proceso en palabras.
Sólo puedo hacerlo en el Idioma del Espíritu
Y aún no estáis preparados para comprender
el significado
que yo VEO más allá de las ondas...


Texto de Alexandre S. (Miembro Sd. de ULHP)

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Que el mundo se detenga, quiero bajarme...

La mayor parte de los seres humanos se tambalean en el fino entre la neurosis y la salud. Algunos se sienten sabios y apacibles o tensos e irritables, depende de nuestro barómetro psicofísico, como nos sintonizamos con nuestra propia energía y la del medio ambiente que nos rodea. Es decir, quienes habitualmente trabajamos con energías podemos observar que las tendencias sanas o neuróticas están siempre ahí. Coexisten, incluso en situaciones semejantes. Las circunstancias externas tienen el poder de exacerbar la confusión: cuando el hombre se siente agobiado, se estanca y se paraliza. Encuentra un resquicio y lo cierra.
El cierre neurótico es como si dijéramos: "que el mundo se detenga, quiero bajarme". Esto sucede frecuentemente cuando las expectativas humanas sobre cómo deberían de ser las cosas (ejemplo, el despertar, nuestra realidad, etc) se ven insultadas por la realidad física (matrix de los matrix). La realidad física penetra en los filtros conceptuales, y no se corresponde con la imagen o deseo acerca de cómo piensan que debería ser. Se sienten frustrados y reaccionan emocionalmente (sujeto anímico, ego). Porque la situación no concuerda con sus expectativas (no se consigue despertar, no hay progresos), se resisten a lo que ocurre encerrándose en el modo de vida al que están acostumbrados (dejándolo todo de lado. Estancamiento. No progresión). Y este encierro puede ser por un instante o por toda la vida.